Homenaje surrealista y fantástico de Pratt a la memoria del autor de El Principito. Nos encontramos en el 31 de julio de 1944, cuando Saint-Exupéry parte a una misión de guerra por el cielo del Mediterráneo, que será la última de su vida. A bordo de su French Lightning P 38 F5 B No. 233 ve (o le parece ver) al Principito, que le habla desde una nube. Así comienza una doble historia, la que sigue a su último vuelo, perseguido por un caza alemán, y la otra en la que revive los momentos más importantes de su vida. Recuerdos del pasado se van mostrando frente a él: su vuelo con la Compañía Aéreopostale Argentina (visitando a su amigo Mermoz), elegantes bailes en Buenos Aires (donde conoce a la hermosa Consuelo Gómez Carillo, su futura novia), o la terrible experiencia que tuvo con su mecánico Prévot, después de que el avión se estrellara contra el desierto de Libia mientras intentaba registrar la ruta París-Saigón (fueron salvados milagrosamente por un árabe tras varios de días de marcha en el desierto).

Después Saint-Exupéry entra en su propio sueño, caminando sobre nubes que parecen estar hechas de algodón, incluso aparece una cabina telefónica desde la que llama a sus amigos literarios Leon Werth y André Gide, así como a su esposa Consuelo, para darle un último adiós. Mientras tanto, el caza alemán se acerca más y más al avión Saint-Exupéry … quedando tan solo de él la leyenda de ese último vuelo.